Campana fue un infierno y el Diablo Rojo su rey. Paso Cero se durmió en los arranques de cada etapa. La primera siesta la recuperó, pero de la segunda no pudo volver. Independiente tuvo un arranque demoledor: con un gran trabajo colectivo y mucha rapidez, clavó un parcial de 14-0. Paso Cero no pudo amigarse con el canasto hasta casi el cierre de los primeros 10, que cerraron 22 a 7 para los zarateños. En el segundo chico el Rojo sentó a sus figuras por exceso de faltas, y Paso Cero se hizo fuerte en el poste bajo, donde podía sacar diferencias para reducir a 6 (31-25) la diferencia entrando el descanso largo.
En el complemento entró mejor el Azul, comandado por Palacios desde la base, al tiempo que comenzó a gravitar Santini. El marcador se igualó en 33 y parecía que el partido cambiaría de dueño. Pero Franco Pracchia puso la cara y comandó un parcial de 9-0 que le permitó a los suyos para tomar aire 52-42. En la recta final el Rojo se puso firme. Bruno Pracchia corría la contra y penetraba para anotar o asistir al mejor ubicado. Paso Cero dependió del del tiro de tres de Santini y le alcanzó para disputar el chico (23-22 lo ganó Independiente) pero no para volver al partido. Fue victoria para el Diablo va por el título.
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Posiciones