En un partido parejo, que en nada se pareció al 80-52 de la fase regular, el Diablo volvió a meter la cola y se quedó con el título.
Ambos equipos jugaron a contragolpear en el comienzo del match: Lucio Cadelli adelantaba a Átomo. Independiente tardó en calibrar la mira, pero guiado por Lisandro Pracchia (8) acomodó su ofensiva para quedar abajo por 6 (23 a 17) al cierre del primer tramo. En el segundo período ambos equipos rotaron los bancos y el nerviosismo y la imprecisión hicieron se adueñaron del partido, originando un pobre parcial de 8-14, que se explica en favor del Rojo por las 3 bombas consecutivas que anotaron Santiago Amatrian (3), Antonio Soria (3) e Ignacio Murillo (9), para igualar el resultado en 31 al cierre de la primera mitad.
A regreso de la acción Átomo lució mejor de la mano de los hermanos Cadelli tomando todas las decisiones. Bruno Pracchia se hizo cargo del ataque Rojo y Juán Menéndez (9) luchó todos los rebotes, y con esos argumentos Independiente pudo recuperar terreno hasta quedar a 4 (50-46) a falta de 10 por jugar. Una bomba de Murillo y tres libres seguidos iniciaron la marea roja hacia el título. El trámite se inclinó claramente en favor del Diablo, manejado desde la base por Bruno Pracchia, que hizo jugar a su equipo. Átomo entró en desesperación. Franco Garín no pudo gravitar en la medida que lo hizo a lo largo del certamen, y dependió de las guapeadas de Guido Cadelli para sostener sus aspiraciones al campeonato. Pero no alcanzó. En los últimos 2 minutos Átomo falló 6 libres que fueron determinantes. En cambio el Rojo fue efectivo cuando le tocó ir a la línea de los suspiros, desde la que supo cerrar el juego para coronarse como el primer campeón del torneo de verano de Campana en la categoría libres.
Posiciones