Un conflicto personal surgido en una tira de inferiores está poniendo la recta final de la temporada 2017 de la Asociación Zárate-Campana al borde de un  conflicto difícil de pronosticar hacia el futuro.

El presidente de Peñarol, Roque Longo, presentó una denuncia penal por amenazas contra el árbitro Ezequiel De la Peña, durante un encuentro de categorías formativas que se estaba desarrollando en el club Belgrano hace un par de semanas.

Ante esta situación, el Colegio de Árbitros de la ABZC emitió un comunicado en el que informaba que no designaría jueces para los partidos que involucren a Peñarol hasta que se solucione el conflicto.

Otra complicación en las negociaciones es que al recurrir a la justicia ordinaria, el club pilarense dejó de lado las instancias de la entidad deportiva para poder dar una solución.

Por ese motivo, Peñarol ya lleva 3 juegos con partidos de Primera División reprogramados y no se sabe cuándo se disputarán.

Esto, además de ser perjudicial para los pilarenses, entorpece al resto de los equipos que tampoco pueden terminar la fase regular del Clausura. Como tampoco se puede armar la grilla de playoffs, lo que paralizaría todo el certamen.

Intermediación

La Asociación Zárate-Campana buscará ser el intermediario del conflicto, aunque no puede tener injerencia en la justicia ordinaria.

El presidente, Leonardo Corvini, está gestionando una reunión con ambas partes para poder tener algún tipo de negociación que pueda solucionar la situación.

Desde el Albiceleste, el titular de la entidad le señaló a 5inicial que la determinación de ir a la justicia fue personal, que no involucra al club.

Dice que se sintió amenazado y corría riesgos su integridad física tras una discusión con el árbitro. Por eso fue a la Comisaría para luego retirar a sus hijos del club.