Jonatan Treise vivió el domingo su bautismo de gloria en la máxima categoría del básquet del país. Se coronó campeón de la VIII edición de la Copa Argentina en el cuadrangular final desarrollado en Trelew.
Pero no tuvo mucho tiempo para los festejos. Es que mañana a la noche, en Córdoba, será protagonista del partido inaugural de la temporada 2009/10 de la Liga Nacional en la que intentará ser protagonista principal junto a Quimsa visitando a Atenas.
Jony analizó las chances de los santiagueños para afrontar el año en el que asoman como candidatos, más aún, después de conquistar el certamen de pretemporada.
“El equipo está muy compacto y cuando vayamos encontrando volumen de juego, con el correr de los partidos, se va a hacer mucho más poderoso”, analizó en la página oficial de la Asociación de Clubes.
Después de la entrega de premios en el estadio Municipal Nº 1 de Trelew, el base de Quimsa contó sobre su alegría por haber conseguido el título en la Copa Argentina.
“Empezamos como queríamos. En un primer momento el objetivo era llegar al Cuadrangular Final. Cuando llegamos, nos propusimos salir campeones y pudimos conseguirlo”, resaltó.
“Creo que es merecido. No cerramos bien el último partido contra Peñarol, pero queda para la anécdota, lo que vale es que salimos campeones”, subrayó.
-¿Qué fue lo que más te gustó del equipo en esta Copa?
- El equipo está muy compacto. Material hay, somos gente grande, hay jugadores inteligentes, así que tenemos que seguir mejorando y corrigiendo defectos.
-¿No hay mucho tiempo para festejos porque ya empiezan la Liga Nacional en Córdoba?
- Seguro, no podemos relajarnos. Tenemos las mejores expectativas. Hay que salir con los tapones de punta desde el miércoles (por hoy), para empezar a sumar puntos y tratar de meternos en el Súper 8, que es otro objetivo que tiene el equipo. Así que vamos a trabajar para eso.
En cuanto a su actuación personal, Jony fue autocrítico y sincero como siempre. “Tengo que mejorar, mejorar los tiros libres…”, señaló apuntando a sus dos intentos fallados que podrían haber asegurado el triunfo de Quimsa antes del suplementario con Peñarol.
“Todos los años me gusta ir aprendiendo, en cada entrenamiento y en cada partido. Hoy me queda la enseñanza de que no puedo errar libres. No cuenta nada después de eso, la cabeza te trabaja a mil. Igual somos campeones, así que hay que disfrutar”, concluyó.
