Y Junín volvió a levantar la copa. La de campeón deportivo. Porque la de anfitrión y la de cultor de la camaradería entre los protagonistas de este provincial ya las había recibido antes, a través de los constantes elogios de todos los participantes, que quedaron maravillados por la organización, que estuvo en los detalles a través de Mauricio Oliva, José Barile y todos los que, sin saltar a la cancha, jugaron el Provincial de punta a punta.
Luego de una fase de grupos donde el único escollo serio resultó ser Zárate-Campana, Junín pasó bien en las semis a La Plata. Su rival en la final era Bahía Blanca, un equipo que nunca brilló, pero siempre ganó. Así llegaban a la final los dos invictos, repitiendo la final de 2017 en Mar del Plata.
Con los triples de Fernando Temporelli (8), Pablo Amigo (8) y Nico Vera, el conjunto que conduce Claudio Palermo se alejó 14-2 en el arranque, silenciando al numeroso público que copó las tribunas del Club Junín, y obligando a Raúl Scaglione a solicitar su primer minuto. Con algunos ajustes, en la reanudación llegó la remontada del local, con los primeros puntos de Paolin, el mejor jugador de la final, que con dos bombas desde tercera dimensión consecutivas revivió al campeón, que en pocos minutos se puso a tiro en el score con buenas defensas y salidas de contragolpe. A 50 segundos para la campanada de finalización del primer cuarto llegaría la igualdad en 19, que quebraría Juan Berestein para estampar el 21-19 con el que llegarían al primer break. Junín estaba a 30 minutos de la gloria y los jugadores de los Los Indios tenían algunas cosas para aprender de su cuerpo técnico.
Con la segunda unidad de ambos en cancha, en el comienzo de las acciones el trámite fue parejo, más allá de una prematura ventaja de 6 en favor del campeón. Dentro de esa paridad, no quedó desapercibida una gran acción de Gerardo Lares (1), filtrando un pase para que Martín Carbajal (8) llegara al gol. La sociedad Lares-Carbajal se repetiría casi inmediatamente, cuando una tapa de Edgardo Rotelli (6) a Ignacio Iozzo (6), que había incursionado en tierra de gigantes, posibilita otra contra con transición en tres calles en la que Lares vuelve a encontrar a Carbajal con el dedo en el gatillo para adelantar 31-25 a los suyos. Junín estaba mejor y Palermo pidió un tiempo muerto para enderezar el rumbo. Sin embargo la cosa no mejoró para el elenco retador al regreso del juego. El ingreso de Juan Pablo Pontelli (-) impidió que Eddie Pallottini (2), que arriesgó jugar luego de una lesión en las fase clasificatoria, se posteara aprovechando su diferencia de centímetros sobre Marcelo Barile (-). A los del sur se les hizo difícil vulnerar la defensa juninense, y en los minutos que le quedaban al primer tiempo el dueño de casa logró aumentar a 8 (36-38) su ventaja.
El último tren del título hacia Bahía pasó en el arranque del complemento. Un foul y vale con antideportiva sobre Pablo Amigo (8), y un triple del calvo base en la reposición desde mitad de cancha pudo el marcador 38-33. Pero hasta ahí llegarían las esperanzas del retador. En los minutos que siguieron Bahía perdió consistencia en ataque. Rotelli y Pollio encestaron tras recuperos de su equipo en defensa, en tres ofensivas pusieron a Junín 42-33 arriba con chances de aumentar tras el cobro de una antideportiva sobre Pollio. Porcos minutos después llegaba el golpe de knock-out cuando Paolin mostraba toda su clase y, sin ponerse nervioso, llegaba al gol con una flotadora cuando el reloj de 24 ahorcaba. Junín alcanzaba la que hasta ese momento sería la máxima de 15 (52-37) y la fiesta comenzaba a desatarse en las tribunas. El tercer actor cerró 54-40.
La dupla técnica Berestein-Paolin vuelve a facturar en el arranque del capítulo final. Bahía no encuentra opciones de gol y una contra de Berestein establece una diferencia de 20 (62-42) que arenga a la multitud, que empieza a cantar el tradicional grito. Con 2:22 para terminar Scaglione sustituye a Pollio y Paolín para que reciban el caluroso y merecido saludo de la hinchada. Bahía acepta también la derrota y recambia jugadores para terminar el partido. Gustavo Nani (4) se da el gusto de anotar los últimos 4 puntos del otra vez campeón, que vivirán para siempre en su memoria. En la entrada del gimnasio, a José se le pianta un lagrimón, porque esos pibes a los que conoce y acompaña desde mini están a segundos de levantar la doble corona del maxibásquet. Llega el cierre, los festejos, el aplauso genuino de Bahía Blanca, y la entrega de premios.
Hay muchas cosas para decir y contar sobre el Segundo Torneo Provincial de Maxibásquet de Buenos Aires. Cuatro días de fiesta, con un campeón como excusa. Junín es otra vez el rey, y el maxibásquet sigue dando que hablar. Hasta La PLata 2019.
Síntesis
Junín Rojo (68): Marcelo Barile (-), Gabriel Paolin (15), Gerardo Lares (1), Juan Manuel Beresteirn (13), Juan Pablo Pontelli (-), Gustavo Nani (4), Federico Pollio (13), Gabriel Ferrari (4), Martín Carbajal (8), Cristian Mosca (-), Luciano Berestein (-), Edgardo Rotelli (6) y Mauro Puertas (4). DT: Raúl Scaglione - Delegado: José Luis Barile
Bahía Blanca (50): Eddie Pallottini (2), Fernando Temporelli (8), Julián Simone (-), Gabriel Mangiapane (-), Carlos Sánchez (4), Ignacio Iozzo (6), Pablo Amigo (8), Nicolás Vera (18), Mario Zaccara (2), Adrián Kremer (2), Mauro Domina (-) y Sebastián Martínez (-). DT: Claudio Palermo
Cancha: _Local
Parciales: 21-19 / 15-9 (36-28) / 18-12 (54-40) / 14-10 (68-50)
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