El pueblo de Ezeiza esperaba con ansias la llegada del líder al estadio del Club Atlético y Social, tal es así que fue el partido con mayor asistencia de público en el año para ver a la Academia. Y el encuentro no defraudó a nadie.
En la previa, el panorama no era el mejor para los de Villa del Parque. El “Zurdo Mágico” Abrantes continúa con su lesión ligamentaria en el dedo meñique de su mano hábil (la derecha), Pablo Fonseca está con lumbalgia, Roberto “Totó” Fonseca tiene paradero desconocido después desde que el domingo fuera atacado por una pantera en la zona de Avellaneda y Ian Kulovsky faltó a la cita por estar participando de la Fiesta Anual de la Colectividad Checa en Rio de Janeiro.
El partido
El local arrancó a puro triple y eficacia más allá de los 6,75. Racing no se encontraba en defensa y sólo se mantenía en juego gracias al aporte de Alejandro “El Portero” Faindiño. La mano bajaba pesada sobre la humanidad del “7” una y otra vez. La primera manga cerró 14-10 favorable a los anfitriones.
Para el segundo período, con el artillero G. Caceres descansando en el banco del local, los Leones intentaron darle más dinámica al ataque, sabiendo que en defensa iban a poder descansar. Así, se llevaron el segundo cuarto 12-10, de la mano de “Dr Jota” Aspro, quien también supo conocer las mieles de la mano dura de los rivales. Al finalizar la primera mitad el score favorecía al dueño de casa 24-22 y no se sacaba ventajas.
En el tercer cuarto Racing entró dormido y desde el primer segundo Cáceres, bien asistido por Buján y Luna, fue letal desde los 6,75. El partido siguió teniendo sus dosis de dramatismo porque el visitante, en su afán por descontar, erraba puntos muy fáciles abajo del aro. Pero Ezeiza hizo decididamente mejor las cosas y, con parcial de 21-14 comandaba el marcador 45-36 a 10 minutos del final.
En el capítulo final, la Academia, con mucho amor propio, fue a descontar los 8 puntos de ventaja que tenía el local. Con trabajo de hormiga, punto a punto, aparecieron el “Negro Nando” Nardulli y los cortes sistemáticos del “Chacho” Mannella, Así, los Leones mostraron las garras en la última bola del partido a falta de 8 segundos, con reposición de costado a su favor y el tanteador 60-57 en favor de Ezeiza. Gastón “Moya” Moya se abrió a recibir y fue encerrado contra la línea lateral. Al no tener opciones de pase, se elevó sobre la marca, lanzó a falta de 3” y la pelota entró limpita. Enmudeció el estadio y estalló el banco visitante festejando el acceso a la prórroga. Pero el juez Marino dijo que el tiro valía dos puntos 2 puntos y concluyó el juego 60-59 para el local, que obtuvo el segundo lugar del grupo con esta victoria. Ni ganas de discutir para el visitante. Tan sentidos habían sido los foules recibidos, que esa decisión era el golpe de nocaut para el equipo académico. Igualmente fue un partidazo para los que estuvieron adentro, y también para los que lo vieron desde afuera. Gracias al básquet.
Queda como evidencia la foto de la planilla de juego donde se ve como el partido terminó 60-60, no hay foto del tablero electrónico que también marcaba lo mismo.
Síntesis
Ezeiza (60): E. Ponce (3), M. Goycochea (11), J. Camilleri (9), G. Caceres (22), y S. Luna (1) (FI); A. Delfino (6)(x), J. Montoliu (-) y R. Buján (8).
Racing Club (59): Maximiliano “Chacho” Mannella (5), Alejandro “El Portero” Faindiño (17), Pablo “El Flaco” Barragán (4)(x), Fernando “Negro Nando” Nardulli (8) y Gastón “Moya” Moya (4) (FI); Juan José "DrJota" Aspro (18)(x), Hernán “Albo” Mandrafina (3).
Cancha: Ezeiza.
Parciales: 14-10 / 10-12 (24-22) / 21-14 (45-36) y 15-23 (60-59).
Árbitros: R. Bauni y L. Marino
Tragame Tierra
La mención es para el banco de Racing, que estalló en un grito en la última bola creyendo que el empate los llevaba a suplementario, pero el juez Marino se encargó de que la cosa se termine ahí. Vale dos y todos a bañarse.
Fuente/s: Básquet +35 Racing VdP