En un partido que contó con todos los condimentos de una gran final, el Rojo del Oeste terminó ganando el primer juego de la serie por el campeonato por un margen exagerado respecto de lo que es el potencial de ambos conjuntos. La diferencia se explica más por el temperamento de los visitantes, que les permitió remontar un partido que estaba 20 puntos abajo y ponerse en partido, y les pasó factura y los condenó a una derrota por 15 tantos. Pero las sensaciones fueron mutando a lo largo de la noche, y la victoria bien pudo haber quedado en manos de los de Ramos Mejía.
En el comienzo de la velada ambos arrancaron imprecisos. Porteño apostó la dupla integrada por el Cata Ruarte y Oscar Roca (3) para llegar al gol. El primero tandó de apuntarse en la planilla que confeccionaba Juan Bujanda (oficial de mesa de la visita), mientras que el segundo iniciaba una noche en la que estaría peleado con el aro. Por el lado del anfitrión, con Marcos Alonso (8) bien marcado en una noche en la que tampoca estaría amigado con la red (su mejor momento sería un lapso en el que encestó 5 puntos seguidos), los que aparecieron fueron Andrés Olmedo (13) y los jugadores de rol, un dato muy importante porque en las semis ante Altube no habían aparecido. Pablo "Chapa" Authier (6) y Waldemar Fracuelli (9), terminaron de sumar para el 16-10 con el que el local empezaba a ganar. Estudiantil pareció apostar más fichas a la primera manga, mientras que en la segunda su equipo parecía más de contención, como para aguantar una diferencia que no había podido establecer en los primeros 10. Morón dispuso un quinteto con más marca, y con la dupla Julián Olmedo-Bellísimo como estandartes. Entre ellos dos, más un oportuno triple de Gabriel Figuera (3), dos canastas consecutivas de Fernando "Mago" Harguindey (4), y un libre de Mariano Potel (1), terminaron de redondear un parcial de 26-12. Más allá de la buena labor de Lalo Canovas en el visitante, una constante del partido fue el excesivo entusismo que caracterizó a CAEP, que en su afán por marcar a los jugadores clave de Morón, cometió faltas innecesarias, ante una dupla arbitral que estuvo muy rigurosa en el comienzo de la noche y se tornó más permisiva hacia el final de la velada, más allá de alguna intervención para marginar del juego a jugadores que incurrieron en algún agravio que amerito mandarlos temprano a las duchas o sancionar faltas técnicas. Una cierta tensión se vivió por momentos del lado de la banca visitante, que de repente más enfocada en jugar en equipo podría haber obtenido un resultado diferente. Con ese clima, el cierre del primer tiempo parecía liquidar tempranamente el primer punto de la serie al finalizar 42-22 a favor del anfitrión. Aunque en el descanso Cristian Martín (6) le avisaba al cronista 5 Inicial "vas a ver que en el tercero lo damos vuelta".
Y la profesía del ayuda de Estudiantil casi se cumple. Con las rotaciones concluidas, lo que sucediera en los siguientes 10 minutos sería crucial. Con un poco más de tranquilidad, Porteño salió a buscar el descuento, pero en el arranque del complemento el Rojo del oeste resistía y la diferencia prácticamente no cedía. Pero luego de 3 minutos, con Ruarte como general y Canovas como su mejor soldado, una seguidilla de aciertos en ataque y en defensa de Estudiantil pusieron el score 53-44, motivando el pedido de minuto de la banca local. La visita desbordaba confianza, mientras algunas luces de preocupación se encindían en el panel de control de los duelos de casa, y nada tenía que ver con el accionar de Sergio Possidente, su oficial de mesa y responsable del reloj en la velada de ayer. La sangría de puntos siguió hasta el cierre del tercer acto, que concluyó con un triple crucial de Canovas que ponía las cosas 53-50 y dejaba a Porteño a 3 de la igualdad, descontando 17 puntos (28-11) en ese lapso. El juego crecía en emoción e incertidumbre, y Pablo Vázquez se comía las uñas en la tribuna. El capítulo final tuvo un desenlace inesperado: luego de unos primeros minutos de igualdad, el ingreso de Fracuelli pareció inclimar la balanza para el lado del dueño de casa, que sacaba una luz de 5 puntos que a esa altura parecían decisivos. Morón parecía recuperar su identidad, tras varios minutos desaparecido. Pero los de Ramos Mejía volvieron a la carga y emparejaron las cosas 59-58, con la posibilidad de pasar al frente. Pero no pudo ser. Un triple de esos que dejan huella y dos libres de Julián Olmedo le dieron otra luz a los locales, que reafirmaron sus pretensiones de victoria cuando su hermano Andrés acertó otra bomba de tres para ampliar la ventaja ante un rival que en los minutos siguientes se fue del partido. Discusiones con los jueces, que terminaron en una detención del partido por algunos cruces dialécticos entre rivales y de los visitantes con los árbitros, derivaron en la salida a las duchas para Lisandro "Licha" Raffioni (-) y Rubén Imbriale (NJ), más la descalificación por dobles faltas técnicas para Canovas y Martín en Porteño, que a esa altura del partido estaba pensando en otra cosa. Julián Olmedo dio la estocada final jugando y haciendo jugar: dos libres suyos y de Bellisimo, más dos corridas de costa a costa terminadas por él y una tercera a cargo de Marcos Alonso, liquidaron el partido de manera más amplia de lo que se presumía al inicio del último período. Son más los interrogantes que las certezas que dejó esta primera vuelta de la gran final de Primera B: ¿Podrá Estudiantil Porteño abandonar la beligerancia y abocarse a jugar en equipo? ¿Contará Morón con un nivel de respuesta similar al de anoche en sus jugadores de rol? ¿Aparecerán los tiradores de triples en esta serie? Ayer la cuenta fue de 6 por bando, pero hubieron más intentos, en especial del lado visitante. En 7 días se desarrollará el segundo capítulo de esta historia.
Síntesis
Morón (82): Marcos Alonso (8), Pablo "Chapa" Authier (6), Pablo Bagnacedri (1), Marcelo Bellisimo (17), Juan Pablo Bo (NJ), Andrés "Pollo" Castellano (NJ), Pablo Corinaldesi (NJ), Gabriel Figuera (3), Waldemar Fracuelli (9), Fernando "Mago" Harguindey (4), Andrés Olmedo (13), Julián Olmedo (20), Mariano Potel (1) y Lisandro "Licha" Raffioni (-).
Estudiantil Porteño (67): Adrián Bonincontro (3), Leandro Mambretti (NJ), Hernán Orsomarso (NJ), Carlos Provic (2), Fernando Rikz (-), Oscar Roca (3), Nicolás Sánchez (5), Daniel Santagada (4), Mariano Ysnardez (NJ), Sebastián "Lalo" Canovas (16), Rubén Imbriale (NJ), Mariano Smutniak (NJ), Cristian Martín (6), Gonzalo "Cata" Ruarte (25).
Cancha: Morón
Parciales: 16-10 / 26-12 (42-22) / 11-28 (53-50) / 29-17 (82-67)
